odiado Chimaltetengo.
Tantas veces desié salir y no volver jamás! Han sido ya tres años desde que te abandoné, sin embargo aún te recuerdo.
Recuerdo todas las veces que pasaba aplanando las calles (obviamente uno pobre no llega ni a cicle). Tantos días fregando en el parque, escondiéndome de los mareros. Comiendo tortillas con carne y tomando atol con mi marchanta que ni el nombre me sé.
Mi pueblo, mi tierra. Llena de "jicaques" de cacos y chalamileros que sólo sabe chingar en dondequiera que se encuentren shuteando. No podía andar uno disque presentable porque ya le gritaban "creída" a todo pulmón a cinco cuadras de distancia. Esos majúnches que echan mano en donde puedan a quien puedan. Majes que estudiaron en el Intibruto Leonidas Mensos Avila. Que bajaban en jauría por todas las calles habidas en Chimaltetengo, gritando como micos y corriendo como mulas. Ay! esos majúnches que median 3 pies (1 que miden y 2 con los que caminan). Que perseguían a una inocente que quería ser invisible usagi. Esos caras de pijije que afuera se las llevaban de gallitos pero en sus casas eran choleros!
Pero bueno, pa' que jodinchos me gua recordar de esos manes! mejor recordar las cosas buenas de mi Chimaltetengo. Esperáte ahí! ¿Qué cosas buenas? ¿El polvo? ¿El humo de camionetas? ¿Mareros en la esquina de tu casa? Anda a ponéle velas a otro santo mamaíta! Chimaltetengo es un chingadal de miergdas que ni a buta se ataja! El día que ese tu pueblo cambie será que ya quedó un buen presidente en el País mano!
Pero soñar no cuesta nada (tampoco sobar) y vos podés seguir tratando de recordar y bloggiar algo bueno de ese tu pueble lleno de humasal!
Buena suerte chingonlez!!!
